Ya no hay caras ni caretas para andar, nos robaron nuestra dulce libertad.
Ya no hay tiempo ni una forma de esperar, nos robaron nuestra dulce libertad.
Y encima, tu mirada no esta…
Nos robaron nuestro sueños de un placard, no quitaron la magia de pensar.
Los recuerdos de los que hoy ya no están, y la farsa de un gobierno militar.
Y encima, tu mirada no esta…
Nos educaron según la clase social, y un fusil que nos viene a despertar.
Ha pasado el tiempo y nos duele despertar, sangran las heridas militar.